La Música es el arte es suscitar una experiencia estética en el oyente, y expresar sentimientos, circunstancias, pensamientos o ideas que ligada a un grupo social y a sus acontecimientos, sea la expresión de éstos últimos.
“My Heart Will Go On” —en español: «Mi corazón seguirá
latiendo o Mi corazón seguirá adelante»— es la canción principal de la película
Titanic del año 1997, interpretada por la cantante canadiense Céline Dion.
Fue
incluida en la banda sonora de Titanic y en su álbum Let's Talk About Love.
Fue
número uno en las listas de popularidad de diversos países, incluyendo Estados
Unidos, Francia, el Reino Unido, Canadá y Australia.
Es considerada como la
canción más exitosa del mundo interpretada por una mujer, llegando a vender más
de 30 millones en el mundo. Fue ganadora del Óscar a la Mejor canción original.
La canción apareció en los créditos finales de la película.
Como curiosidad, dicha canción se oyó en el momento del
inicio del famoso accidente del Costa Concordia el 13 de enero de 2012, tres
meses antes del centenario del hundimiento del Titanic.
“Unchained Melody” es una de las canciones más grabadas del
siglo XX, algunos expertos aseguran que ha sido versioneada más de 500 veces.
La letra es obra de Hy Zaret y la melodía fue compuesta por Alex North.
En 1955, North compuso el tema para un obscuro film
carcelario llamado “Unchained“. Ese mismo año, la canción de Alex North fue
nominada al Óscar (galardón que no consiguió) pero el tema se convirtió
inmediatamente en un éxito comercial. De hecho, se hizo tan tremendamente
popular que en una sola semana se llegaron a grabar hasta cuatro versiones,
todas las cuales entraron en el top 30 de las listas británicas. Este hecho
figura en el libro de los record Guinnes de los éxitos británicos: los singles
que entraron en el top 30 (entre mayo y junio de 1955) corresponden a: Jimmy
Young, Les Baxter, Al Hibbler y Liberace.
A lo largo de la historia grandes figuras de la música han
interpretado (aún lo hacen) esta canción. Por citar a los más conocidos
mencionaremos a Gene Vincent en 1956 (la leyenda Rockabilly), Harry Belafonte
en 1956, the Righteous Brothers en 1965 (probablemente la más conocida a causa
de la película “Ghost”), Roy Orbison en 1969, Elvis Presley en 1977 (su última
aparición televisiva), U2 en 2005 (suelen interpretarla en directo pero no hay
grabación en estudio), Barry Manilow en el 2006, o Il Divo también en el 2006
(versión en italiano llamada Senza Catene).
Además del anteriormente citado récord de 1955, esta canción
cuenta con otro récord increible, ha sido el único tema en alcanzar el nº1 en
las listas británicas cuatro veces en la historia. Las versiones que alcanzaron
este honor corresponden a: Jimmy Young (1955); the Righteous Brothers (1990)
[aunque se grabó en 1965]; Robson & Jerome (1995) y Gareth Gates (2002).
Este tema ademas, es el tema principal de la Excelente
pelicula (GHOST) La sombra del Amor o el Fantasma del amor, Interpretada por
Patrick Swayze y Demmi More.
El tema en cuestión está dedicada encubiertamente a la
Modelo Pattie Boyd, quien era esposa del Beatle (George Harrison), quien la conoció
en el rodaje de la película A Hard Day’s Night.
Por aquel entonces, Clapton manifestaba una creciente
adicción a la heroína, lo que le representaba un problema a la hora de
pertenecer a una banda o mantener relaciones estables, todo esto cambió cuando
Patty Boyd se acercó a él durante una crisis matrimonial pidiendo consejo, el
guitarrista se enamoró profundamente de ella.
De allí surgiría Layla, una canción dedicada encubiertamente
a Boyd, y cuyo nombre, en orden de esconder la situación, se inspiró en la
historia de amor árabe “La historia de Layla y Majnun” del poeta clásico persa
Nezami.
Boyd se divorció de Harrison en 1977, luego de huir de la
casa con Clapton, y se casó con éste en 1979.
Sin duda es una letra de su época, los sesenta.
Incomprensión, indiferencia, introspección, ansias de libertad, naturaleza. Una
hija de los sonidos del silencio de Simon y Garfulken (1964: Hello darkness my
old friend, hola oscuridad vieja amiga), aún más evidente si recordamos que la
de la pareja de Nueva York sonaba en el cine con Dustin Hoffman en el fondo de
la piscina de El Graduado (1967), mientras arriba, en la superficie, su padre
le hablaba sobre su futuro: el mismo Hoffman que luego (sólo dos aos después)
encarnaría a Ratzo Rizzo en la película que encumbró Everybody´s talkin,
Midnight Cowboy, Cowboy de medianoche.
El tema podria decirse que es el Robo de una Joyita. Debo matizar
que fue un robo consentido. La pieza la había compuesto y grabado originalmente
el cantante folkie Fred Neil (1936-2001) a principios del 67, en un disco que
se llamaba simplemente Fred Neil (hoy una pieza de museo, una de las madres del
folk rock). Nilsson se la tomó prestada con su permiso para cantarla en la
banda sonora de la película del 69 Midnight Cowboy (John Schlesiger, 1969), y
el pelotazo mundial fue de tal calibre que ese mismo año Neil se vio obligado a
recordar que él había sido el autor reeditando y rebautizando el disco con el
nombre de la canción.
Ironías del estino. Cowboy de medianoche es la historia de
un sonrosado paleto de pueblo de dos metros, Joe Buck (Jon Voigth, el papá de
Angelina Jolie, por cierto) que se va a Nueva York creyendo que puede hacerse
rico como gigoló en Times Square y acaba liado en una relación implicitamente
homosexual con un italoamericano tuberculoso y miserable, Enrico Salvatore
Ratzo Rizzo (Dustin Hoffman) cuya única meta es escapar de su sótano plagado de
ratas y vivir bajo el sol de Florida. Rizzo llegará a Florida pero morirá sin
haber bajado del autocar, justo a pie de playa, a un paso del paraiso.
Fred Neil nació en Cleveland, Ohio, vivió en Nueva York la
mayor parte de su vida y a mitad de los 70 se fue a vivir los últimos años de
su vida a la costa del Sur de Florida. Falleció de muerte natural en 2001.
nilsson.jpgEverybodys´talkin´ es uno de los grandes clásicos
del siglo pasado. Demasiado popular para adquirir la consideración de canción
de culto (al parecer, está prohibido vender millones de copias si quieres
entrar en el olimpo de los auténticos), pero sí en el estatus de pieza de
calidad en la onda de, es un suponer, la ya analizada American Pie o el
Marrakesh Express de Crosby, Stills, Nash and Young (por cierto, me lo he
puesto a huevo, Crosby y Stills fueron discípulos de Neil). Harry Nilsson
(1941-1994) fue un cantante que tuvo notable éxito en la década de los sesenta,
más en Norteamérica que en el resto del mundo, donde solo en los circulos de
iniciados se identifican su nombre con su imagen y, lo que es más importante,
con su obra, porque por encima de Everybody´s logró un gran reconocimiento
mundial cantando Without you (que, rehostias, tampoco era de él, sino del grupo
Badfinger).
No me quedo sin contarles una anécdota entre lo amarillo y
lo esotérico: Nisson era el propietario original del apartamento donde en 29 de
julio de 1974 murió Mama Cass Elliot (The Mamas and the Papas) y el 7 de
septiembre de 1978 Keith Moon (The Who, no se pierdan el solo que les he
vinculado). Tras estos sucesos, le vendió el chozo a Pete Townshend, líder de
The Who.
La entrada no debería de acabar si hacer una mención a la
banda sonora de Cowboy de Medianoche y especialmente a las piezas compuestas
por John Barry. Y de éstas, la lánguida harmónica del main theme, Midnigth
Cowboy.
El día que Gordon Mills le pidió a Gilbert o’Sullivan que
cuidase de su hija de tres años mientras él y su mujer salían a cenar, el más
famoso de los cantautores irlandeses ni siquiera lo dudó un minuto. Eran
amigos. Gordon era para él como un segundo padre. Y Clair… Clair era una niña
adorable.
A Gilbert le encantaba pasar tiempo con ella; jugando, haciendo los
deberes, cantando… Gilbert contó una vez que aquella noche en la que Mills y su
esposa salieron a cenar, la hija del matrimonio le pidió que le subiese un vaso
de agua a la cama. Así lo hizo él. Clair bebió, le dio las buenas noches a tito
Gilbert y se puso a dormir arropada por el cantautor.
Gilbert o’Sullivan, como
empujado por algo que parecía más fuerte que él, bajó al salón de los Mills y
se sentó al piano para componer una de las canciones más bonitas que nunca he
escuchado: “Clair”. En la grabación original se escuchan incluso las risitas de
la pequeña Mills en los últimos tres segundos.